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| - En algún momento, Venalitor se topó con los Scaephylyds y les inculcó la adoración de Khorne. Desde entonces, se convirtieron en sus complacientes esclavos y le sirvieron en cualquier cosa que él considerase oportuna. Durante la 13ª Cruzada Negra, Venalitor lideró una invasión del Caos en el planeta Sarthis Majoris aterrizando en el polo sur del globo. Sus fuerzas superaron rápidamente a la Caballería Acorazada de Hathran enviada a defender el paso helado de las Montañas Reliqus. Durante la batalla, el Justicar Alaric abandonó su puesto e intentó asesinar al Duque Venalitor para quebrar la moral de la horda del Caos. Venalitor le venció y se llevó a Alaric y su hermano Caballero Gris Haulvarn como esclavos a Draakasi. Sus armaduras fueron entregadas al Lord Ebondrake como tributo y se les obligó a luchar en las Arenas de Draakasi. Haulvarn murió en su primer combate, pero Alaric sobrevivió. Venalitor pasó mucho tiempo tratando de corromper a Alaric y llevarlo hacia el Caos, llegando incluso a ordenar al Demonio Raezazel que lo poseyese; pero todos sus intentos fracasaron. En su lugar, Alaric le condujo a una guerra con Arguthrax desafiando los intentos de este último de matarle en las Arenas, sobre todo al asesinar al campeón de Arguthrax y llevarle su cabeza como trofeo a Venalitor. Venalitor sobrevivió a todos los intentos de asesinato de Arguthrax. Sus numerosos cultos lucharon unos contra otros. Al final, se libró una batalla en las llanuras entre Ghaal y Gorgath donde una alianza de los cultos leales a Arguthrax luchó contra el ejército de Scaephylyds de Venalitor. Las fuerzas de Arguthrax vencieron, y tomaron las cabezas y los miembros de los Scaephylyds para mostrárselas a Arguthrax en un desfile. Fue entonces cuando Lord Ebondrake decretó que los Lords de Drakaasi trabajaran juntos para crear un ejército que se uniese a la 13ª Cruzada Negra, finalizando así el conflicto entre Arguthrax y Venalitor. A pesar de esto, la guerra entre ambos continuó de forma secreta. Durante los sagrados juegos de Vel'Skan, Alaric protagonizó una masiva fuga de esclavos poco después de su gran victoria. Alaric también se aseguró que la Guardia de Obsidiana de Lord Ebondrake fuese hallada culpable de la liberación de los esclavos, sumiendo a Draakasi en una guerra civil total. Venalitor siguió el rastro de Alaric hasta el palacio de Lord Ebondrake y allí le atacó. Alaric, sin embargo, consiguió recuperar su Alabarda Némesis de la sala de trofeos de Lord Ebondrake venciendo así a Venalitor. En sus últimos momentos de vida, Venalitor se dió cuenta de que Alaric estaba detrás de todo: desde la guerra contra Arguthrax hasta la revuelta de Draakasi. Alaric eliminó a Venalitor vaciándole las cuencas de los ojos en el castillo de Lord Ebondrake, y empalándolo en una de las espadas gigantescas de Vel'Skan.
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